05 julio 2010

Datos importantes sobre la ley del mecenazgo cultural en el Perú


En El Comercio de hoy lunes, se ha publicado una infografía y datos para entender las características de este nueva ley de mecenazgo propuesta desde el Congreso.

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Incentivos privados: En contraparte con su expansión económica, el Perú aún sufre de un sombrío escenario en el ámbito cultural. La ley de mecenazgo propone corregirlo, atrayendo al capital privado

Por: Alberto Limache Ramírez
Lunes 5 de Julio del 2010

Han transcurrido casi dos semanas desde que la propuesta de ley de mecenazgo fue discutida en el pleno del Congreso de la República.

El acuerdo sobre la propuesta planteada por la congresista aprista Luciana León y mejorada por el Ministerio de Economía y Finanzas es casi unánime. Tal como se plantea, la propuesta crea una buena herramienta para que las actividades culturales obtengan financiamiento, con un gancho inmejorable para las empresas que decidan usarlo: la creación de beneficios tributarios.

“Esta será una manera de canalizar mayores recursos para la cultura brindando incentivos tributarios para los donantes, sin que ello implique generar riesgos para la caja fiscal”, explica la congresista.

Pero, pese a los elevados y necesarios objetivos que tiene esta iniciativa, se ha generado una interrogante entre los especialistas y tributaristas en torno a si resulta adecuado fomentar la cultura reduciendo impuestos.

GASTO

La propuesta de ley de mecenazgo sugiere regular el financiamiento total o parcial que realizan las personas naturales y jurídicas privadas con carácter de donación, para la ejecución de proyectos o actividades culturales que son de interés general.

Como beneficiarios de esta iniciativa se encuentran las corporaciones, universidades, academias, institutos, teatros, galerías bibliotecas y cualquier entidad pública o privada sin fines de lucro, cuyo propósito es realizar investigación, capacitación, difusión, creación y producción de actividades artísticas.

El ámbito de tales actividades va desde el teatro, cine, circo, danza, hasta sitios de Internet con contenido cultural.

“Considero que esta iniciativa resulta conveniente para el país, más aun, si hoy en día el Estado solo destina el 0,084% de su presupuesto a favor de la cultura. Esto resulta insuficiente para el desarrollo de la actividad cultural”, aseveró León.

TRIBUTOS

Luego de ser presentada ante el Ministerio de Economía (quien lo objetó inicialmente), la propuesta ha terminado definiendo beneficios tributarios concretos para las empresas que opten por aplicarla.

Aquellas empresas que relacionen su imagen con el proyecto o actividad a financiar podrán considerar el 100% del valor de su aporte como gasto deducible de su renta imputable para el Impuesto a la Renta. Es decir, el valor considerado para calcular su impuesto se descontará de la cifra que invierta en financiar arte.

El proyecto, tal como resultó luego de las aclaraciones con el MEF, tendrá un tope: solo aplicará el financiamiento en efectivo de proyectos culturales, y descarta las donaciones de por ejemplo, obras de arte u otros cuya valorización pueda complicar la norma.

Finalmente, se tendrá un límite concreto: las donaciones no podrán sobrepasar el 15% de la renta neta de tercera categoría de las corporaciones que lo utilicen.

“Quiero aclarar que esta propuesta no se trata de una exoneración, porque el donante deberá pagar sus impuestos”, sostuvo la congresista León.

Cabe señalar que hoy existe un esquema de incentivo para las donaciones en obras culturales. Por medio de este, las empresas pueden reducir su renta imponible hasta en 10%.

LA CAJA

Este suplemento buscó la opinión de las compañías líderes en el financiamiento de las actividades culturales. Sin embargo, la mayoría desistió de comentar la propuesta hasta ser aprobada.

No obstante, quienes sí se animaron a comentarla son los tributaristas.

“Comparto los objetivos que busca la propuesta, pero los impuestos no están hechos para promover actividades culturales. Además, me temo que se cree un beneficio tributario ineficiente”, sostuvo Mónica Byrne , tributarista del Estudio Rubio, Leguía, Normand & Asociados.

Sin embargo, Sandro Fuentes, socio del Estudio Rodrigo, Elías y Medrano, sí admite la iniciativa.

“Esta propuesta no debería ser conveniente porque se supone que el Estado debiera tener los recursos y una política tan sólidos que puedan acometer, afianzar y desarrollar el ámbito cultural. Pero como eso no es cierto, creo que —a cuenta de los impuestos— debe conseguirse que los particulares financien los recursos”, comentó.

EL DECISOR

En el proyecto que se discutirá en breve en el Congreso, se ha considerado la creación de un registro del régimen de promoción cultural, donde se inscribirán los proyectos o actividades que aspiran ser financiados.

Este punto también es observado por los tributaristas.

“Esta es una puerta abierta para las subjetividades, dado que el INC tendría que calificarlo. Es decir, esta entidad se va a convertir en una oficina de Sunat. Que creo que ya lo es, dado que decide qué espectáculo es cultural para efectos del IGV”, señaló la tributarista Byrne.

Por su parte, Fuentes reclama claridad en las decisiones. “Si no hay prioridades, hasta el corso de Wong terminaría siendo un evento cultural deducible de impuestos”.

Al respecto, Javier Ruzo, presidente de la Asociación de Artistas Plásticos del Perú, reclamó que, para este punto, se convoque a un grupo de personas con experiencia que decida de la manera más objetiva, la calificación de los proyectos a financiar.

“Yo creo que esta decisión debe ser de especialistas, las personas indicadas que estén relacionadas con la actividad cultural”, sostuvo.

EXPERIENCIA

La congresista Luciana León destaca que esta propuesta recoge lo mejor de las mejores experiencias de la región para el impulso privado del arte.

“Esto hará que las iniciativas y patronatos de corporaciones como Telefónica del Perú, Banco de Crédito o BBV Banco Continental tengan sentido económico. Argentina recuperó el Teatro Colón de Buenos Aires con una iniciativa similar y lo mismo podríamos lograr con el Teatro Municipal”, refirió.

Sobre este punto, el Grupo de Diarios América (GDA) informa que en Chile existe un beneficio tributario para donaciones con fines culturales, al cual se puede postular a través del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.

En tanto, en Venezuela hubo intentos de incluir en el proyecto de ley de cultura (también por aprobarse) un capítulo relativo al mecenazgo. Pero la filosofía del actual gobierno de ese país considera que todo lo relativo a la cultura debe quedar bajo la sola responsabilidad del Estado.

ESTADO VS. EMPRESA PRIVADA

Eficiencia en el arte
“El Estado ha probado que sigue siendo ineficiente en el desarrollo de políticas de desarrollo. La cultura no escapa a ello”, sostuvo Javier Ruzo, presidente de la Asociación de Artistas Plásticos del Perú. Por tal razón, expresó su apoyo a la propuesta de ley de mecenazgo.

“La empresa privada es más eficiente en el desarrollo de proyectos culturales. Por eso, si bien en esta propuesta hay puntos por mejorar, creo que es inmejorable atraer al capital privado para que financie la creación de cultura en el país”, afirmó.

Asimismo, consideró que la iniciativa no debe causar suspicacias en el MEF, dado que el monto que dejaría de percibirse por impuestos no será significativo para el fisco.

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