Fue Claude Rocle quien definió con acierto las relaciones entre la música y el cine -dos artes autónomas- como las del sol y la luna, que se iluminan o se ensombrecen según como estén relacionados. Lo cierto es que la música acompañó al cine casi desde sus inicios. Y que, ya en tiempos del cine mudo, prestigiosos compositores (el primero fue Camille Saint-Saëns para El asesinato del duque de Guisa, 1908), al que siguieron Arthur Honegger (La Rueda, Abel Gance, 1923), Erik Satie (Entr’e acte, René Clair, 1924) o Darius Milhaud (Lo inhumano, Marcel l’Herbier, 1924).
Con la llegada del sonoro, cada gran productora crea su departamento musical y urge la especialidad de compositor de cine, la misma que no impide que algunos grandes compositores contemporáneos, como Serge Prokofieff, entablen colaboraciones ejemplares con realizadores, como ocurrió en Alexander Nevsky (1938) e Iván el terrible (1942-46), ambas de Serguei Eisenstein.
Otro paso importante se da cuando el biopic (abreviación de biographical picture) desarrolla sus propias reglas como género en los años 30 y surgen grandes biografías filmadas, entre ellas las de compositores célebres: Chopin, Schumann, Beethoven, etc. tuvieron las suyas, en un filón que está lejos de agotarse y del que hemos visto algunas muestras en el Ciclo LA MUSICA EN EL CINE que ha venido desarrollando la Sociedad Filarmónica de Lima, en el marco de su programa conmemorativo por sus 105 años de vida institucional, los últimos sábados de cada mes desde mayo pasado.
Hemos visto ensayos más audaces, como la Crónica de Anna Magdalena Bach, en la que el clavecinista y director de orquesta Gustav Leonhart encarna al compositor y hace que su música reine. O El silencio antes de Bach, en la que Pere Portabella se acerca a Bach desde la cotidianidad. Y también están las famosas Amadeus, multipremiada cinta de Milos Forman sobre la rivalidad de Salieri respecto a Mozart y Don Giovanni de Joseph Losey, la mejor versión filmada de la famosa ópera mozartiana .
Un Beethoven otoñal e irremediablemente sordo en vísperas de estrenar su Novena Sinfonía y su relación con su copista nos es presentada por la polaca Agnieszka Holland en La Pasión de Beethoven; un juvenil Marin Marais dispuesto a aprender el arte de la viola con su maestro Sainte Colombe protagoniza Todas las mañanas del mundode Alain Corneau, cinta que hizo renacer la música de este genial barroco francés luego de tres siglos de olvido.
Sábado 27 de octubre 11 a.m.
LA PASION DE BEETHOVEN –Copying Beethoven de Agnieszka Holland. EE UU-Alemania, 2006. Con Ed Harris, Diane Kruger, Matthew Goode. 104 min.
Anna Holtz, de 23 años, es una aspirante a compositora con pocos medios que intenta encontrar inspiración y prosperar en la capital mundial de la música, Viena. Anna, que estudia en el conservatorio, se las ingenia para conseguir una oportunidad de trabajar junto al mejor artista vivo:
Ludwig van Beethoven. Cuando, improvisadamente, el escéptico Beethoven la pone a prueba, Anna demuestra sus dotes y su especial valía para la música. El maestro decide aceptarla como copista, lo que da comienzo a una extraordinaria relación que cambiará la vida de ambos.
Sábado 10 de noviembre 11 a.m.
TODAS LAS MAÑANAS DEL MUNDO – Tous les matins du monde de Alain Corneau. Francia, 1991. Con Gerard Depardieu, Anne Brochet, Jean Pierre Marielle. 115 min.
El filme, realizado por Alain Corneau, fue el indiscutible vencedor en 1992 de la gran velada anual del cine galo, al cosechar los premios César -equivalente francés al Oscar de Hollywood-, a la mejor película, el mejor realizador, la mejor actriz secundarla, el mejor vestuario, la mejor fotografía, la mejor calidad de sonido y la mejor banda sonora musical. El ganador del César a la mejor música por la banda sonora de Todas las mañanas del mundo fue Jordi Savall, el más famoso violagambista, director de orquesta y musicólogo español especializado en música antigua quien viene por primera vez a Lima para ofrecer único concierto el 17 de noviembre 2012 cerrando la Temporada 2012 de la Sociedad Filarmónica de Lima,
Todas las mañanas del mundo cuenta la historia de dos músicos franceses de los tiempos de Luis XIV: el misterioso monsieur de Sainte-Colombe, gran maestro de la viola de gamba y militante jansenista, y su discípulo Marin Marais. Gérard Depardieu y su hijo Guillaume encarnan a este último personaje en dos etapas diferentes de su vida.
Francia, Siglo XVII. Narra la historia del maestro de viola más importante de todos los tiempos y su relación con un alumno en la corte de Luis XIV de Francia.
Las funciones son gratuitas en la acogedora Sala Azul del Centro Cultural de la Universidad Católica (Av. Camino Real 1075, San Isidro) los sábados en matinal. Los esperamos. Aún quedan 2 citas importantes. El ingreso es libre.
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