08 septiembre 2009

Un ilustre huésped en Lima


EL RECONOCIDO TENOR ESPAÑOL CONVERSÓ CON EL COMERCIO SOBRE SU TRAYECTORIA. POR LA MAÑANA FUE CONDECORADO POR EL ALCALDE DE LIMA CON LA ORDEN AL MÉRITO EN EL GRADO DE GRAN CRUZ, LUEGO VISITÓ LOS TEATROS SEGURA Y MUNICIPAL.

Por: Alberto Revoredo

El Comercio

¿Cómo siente que ha evolucionado su voz en medio siglo de trayectoria? El repertorio, con los diferentes estilos, va cambiando con los años. Empecé en la carrera de una manera más lírica, después fui tenor lírico spinto y dramático. He hecho también partes de tenor wagneriano, pero lo importante es que el tenor mantenga el timbre fresco. Eso es lo importante, sonar a tenor, que cuando abras la boca la gente pueda decir ese sonido es de tenor. Ya no importa si el repertorio es más ligero o más dramático, pero que la gente identifique que es un sonido de tenor.

¿Cómo trabaja las interpretaciones? El maestro Eugene Kohn me comentaba que se queda con su interpretación de Otelo por ejemplo… Para interpretar a un personaje de esa envergadura, de esa dificultad, tienes que conocer mucho la historia, estudiar las características del personaje. Es importante saber o imaginarte cómo sería él físicamente, cómo reaccionaba en ciertos momentos de rabia, cómo eran sus momentos románticos, cómo caminaba, según la ropa que llevaba y todo. Lógicamente, examinas también la partitura y examinas lo que Verdi, en el caso de Otelo, te ha pedido; en que hay pasajes muy líricos, pasajes muy dramáticos, de gran poder, o pasajes en que apenas se requiere un hilo de voz con un sentimiento muy especial.

El año pasado hizo ópera barroca por primera vez. ¿Qué otras cosas que no hizo le gustaría hacer? Primero Simón Boccanegra. Después tengo una ópera de estreno mundial, que vamos a hacer en Los Ángeles y que se llama “Il Postino”, basada en la película; en que voy a interpretar la parte de Pablo Neruda. Algunas cosas más haré, pero lo que yo quiero es hacer bien lo que haga. Eso es lo más importante.

Usted ha dicho que no va a dejar el canto, sino que el canto en algún momento lo va a dejar a usted. ¿Con qué ópera le gustaría retirarse? No lo sé. El día que sienta que ya está, saldré y le diré al público: “Señores, esta fue mi última función”. No quiero preparar despedidas ni nada.

¿Reinaguraría el Teatro Municipal de Lima si se lo pidieran? Lógicamente, ya que allí fue donde debuté hace 45 años. Me encantaría.

En el recorrido diurno que hizo por Lima lo vimos besar la foto de su madre en el teatro Segura… Sí, sentí una gran emoción. Mi padre y mi madre tenían un contacto con el público de Lima muy grande. Había muchos españoles, también, sobre todo del País Vasco, de donde era mi madre. Tenían muchas amistades.

¿Cómo sería un plácido domingo para usted? Mis plácidos domingos, cuando crecía en México, consistían en irme en la mañana al fútbol, por la tarde a los toros, y por la noche a la zarzuela, a ver a mis padres. Ese seguiría siendo un buen plácido domingo. Hoy en día, cuando tengo un domingo libre, me gusta pasarlo con toda la familia.

1 comentario:

Yudith dijo...

GRANDISIMO PLACIDO!!!!!!!! Te adoramos!!!
Yudith!